Las fuentes de escritura mas antiguas datan de hace cientos o incluso miles de anos. Pero los archivos digitales están escritos en materiales perecederos, como los Cds o las memoria usb. Estos dispositivos a menudo se desgastan después de unos pocos años. Los sistemas de Gestión Digital de Restricciones encadenan la cultura contemporánea (libros, música o películas) a estos dispositivos y medios, y serán perdidos con el medio en que han sido guardados.
Aunque el bloqueo en la cultura es un gran problema para el uso privado, supone un problema mucho mas grande para la bibliotecas, archivos, museos y otras instituciones. Estas almacenan y difunden nuestros registros, que se están convirtiendo cada vez mas en archivos digitales por lo que es necesario que el contenido pueda ser copiado. Ademas, los sistemas DRM solo duran el tiempo que las compañías los venden. Cuando el sistema DRM desaparece, el contenido se mantiene bloqueado de por vida.
Mientras que las bibliotecas y registros han conservado nuestro conocimiento cultural durante siglos, ahora están obligados a invertir importantes sumas de dinero público en material que dejara de ser legible en unos pocos años; se perderá una gran cantidad de fuentes culturales, históricas y educativas. Los investigadores del futuro quizás se pregunten por qué la sociedad de hoy en día autobloqueó su propio conocimiento.